El 8 de mayo de 1856 marca un hito importante en la historia de la Policía de Misiones, Argentina, cuando se emitió un decreto que estableció una Jefatura Militar en la región para la protección de los yerbales y la seguridad pública. Este evento histórico sentó las bases para la formación de la policía en la provincia.
En esa fecha, el Sargento Lino Martínez, miembro del regimiento 3 de línea con sede en la ciudad de Siete Puntas, partió de Corrientes junto con un grupo de hombres. Después de varios días de viaje y enfrentar diversas dificultades, llegaron a las orillas del Río Uruguay, cerca del paraje conocido como San Javier, donde se estableció la primera Jefatura de Policía de Misiones en un modesto rancho de madera con compartimentos de adobe y techo de paja.
El contingente estaba compuesto por unas treinta personas, entre policías y sus familiares, mientras que los efectivos policiales eran apenas doce. Pocos días después de su instalación, se distribuyeron por la región, estableciendo la mitad de los efectivos en la comisaría de San Javier y el resto en diferentes destacamentos de la zona. Esta presencia policial en casi todo el territorio permitió brindar seguridad y administrar justicia en los montes, secaderos de yerba y otros lugares donde se requería.
En aquella época, la función de la Policía de Misiones trascendía su rol estrictamente policial. Además de mantener el orden, desempeñaba funciones sanitarias, higiénicas, viales, de obras públicas, forestales, fluviales y municipales. Su labor abarcaba una amplia gama de responsabilidades para salvaguardar los intereses y el bienestar de la comunidad.
En mayo de 1981, la Jefatura de Policía de Misiones adoptó oficialmente un emblema que representaría a la institución. El logo, diseñado por el Oficial Ayudante José Luis Carbonell, tiene un formato ovalado y muestra al fondo el paisaje misionero con las Cataratas del Iguazú y el sol naciente. En primer plano, se encuentra el mapa de la provincia de Misiones y la imagen distintiva del «gallo policial».
El «gallo policial» se ha convertido en un símbolo reconocido mundialmente. Representa el coraje, la vigilancia y la atención constante. Sus orígenes se remontan al siglo XVIII, cuando un bandido francés utilizaba el canto distintivo del gallo como señal de comunicación con sus cómplices. Esta asociación entre el gallo y la policía comenzó a utilizarse en Argentina en 1887 y hoy en día es un emblema identificativo de las fuerzas policiales a nivel mundial.
En resumen, el Día de la Policía de Misiones conmemora la creación de la primera Jefatura de Policía en la provincia. A lo largo de los años, la policía ha desempeñado un papel crucial en la protección de los intereses públicos y el bienestar de la comunidad, extendiendo su función más allá de lo estrictamente policial.
