El chofer de la empresa Don Casimiro, de 36 años, denunció anoche que la unidad que conducía fue apedreada y producto del ataque se rompieron tres ventanillas, poco antes de las 22.
El empleado de la empresa con sede en la ciudad de Posadas, se encontraba conduciendo el colectivo de la línea 56, interno 531, tras finalizar su recorrido en el barrio Anselmo de la localidad de Candelaria, trasladándolo hacia la empresa para hacer entrega del coche.
Circulando sobre la avenida Bosseti e Irigoyen, dijo sentir un impacto en la parte lateral izquierdo del coche y constató que se habían tres ventanas producto de impactos de piedras.
El chofer dijo además que no pudo ver quién o quiénes fueron ya que la zona en donde ocurrió el ataque era de poca iluminación.