Según consignaron fuentes consultadas por La Voz de Misiones, la audiencia fue programada para horas de la mañana, instancia en la que Aguirre deberá completar el trámite para designación de un abogado defensor y luego será indagada sobre las acusaciones que pesan en su contra.
En esa instancia, la muchacha tendrá la posibilidad de brindar su versión de los hechos o bien abstenerse de declarar, tal como lo ampara su derecho y sin que ese silencio le signifique presunción de culpabilidad alguna.
Hasta el momento, la tiktoker enfrentaría cargos por los delitos de “calumnias”, “injurias” y “amenazas”. De avanzar el proceso, la causa por los primeros dos delitos mencionados tendría destino de juzgado correccional, mientras que la tercera quedaría en el juzgado penal.
De igual manera, todo dependerá de la continuidad de la pesquisa, dado que en el allanamiento de su vivienda la Policía además de los aparatos electrónicos presuntamente utilizados para realizar las publicaciones denunciadas como agraviantes, también incautó una escopeta vieja y un frasco con cogollos de marihuana, lo cual podría ser fundamento para otras imputaciones.
También fue notificada de desobediencia judicial, ya que continuaron realizando publicaciones de la cuenta denunciada a pesar de una restricción establecida por la Justicia.
La mujer se encuentra libre y, según aclararon las mismas fuentes, en ningún momento fue demorada. La información indica que Aguirre fue trasladada a sede policial para certificar sus datos personales y cumplimentado ese trámite regresó al mismo domicilio allanado horas antes.
@Soymisionera
La denuncia en contra de la influencer se radicó en octubre, pero los hechos denunciados se habrían registrado en agosto y por esa razón intervino el Juzgado de Instrucción Dos, que estaba de turno en ese momento en Posadas.
La cuenta de Florencia Aguirre (@soymisionera en Tik Tok), acumula ahora poco más de 35.000 (6.000 más que el fin de semana) seguidores en la red social de origen chino, y desde el comienzo fue utilizada por la usuaria para expresarse en contra de las políticas de públicas locales y en contra del gobierno provincial en general.
Con el paso del tiempo, la acumulación de seguidores dio impulso a la tiktoker, que recibía acompañamiento, denuncias y mensajes de detractores en proporciones similares, según comenta en sus videos, todavía disponibles.
Sin embargo, las reproducciones de los videos con escraches a políticos y las acusaciones sobre presuntos actos de corrupción sustentadas por pruebas que, supuestamente posee la acusada, proliferó, alcanzando gran popularidad y tráfico que se hizo viral en el medio local.
Florencia mantuvo, públicamente, contrapuntos, diferencias y enfrentamientos con funcionarios del gobierno provincial como Roque Gervasoni, aunque luego profundizó su mensaje con más acusaciones, filtrando inclusive información de la vida privada de hijos de funcionarios, y haciendo pública información privada de sus familiares, como los lugares de residencia.