La empresa yerbatera de la familia Puerta quedó envuelta en una grave denuncia en los medios nacionales por la compra de grandes cantidades de poleo, un producto vegetal que se encuentra prohibido en los paquetes de yerba “pura” pero que se usa en los paquetes de “yerba compuesta” hasta un máximo de 40%.
El conocido periodista Eduardo Feinmann, desde su programa en LN+, reveló un remito de compra de la empresa Yerbatera Misionera, de miles de kilos de poleo, que servirían para mezclar con la yerba mate produciendo un abaratamiento del costo del producto. El poleo es 10 veces más económico y pasa desapercibido en el gusto.
El diputado provincial Pedro Puerta, hijo del exgobernador Ramón, salió a desmentir mediante un comunicado de prensa que exista un vínculo comercial entre la empresa familiar y la firma vendedora de poleo. De esta manera buscó desligarse de la compra de poleo para agregar a la yerba de su empresa.
Pero ayer en declaraciones a Radio República, reconoció que sus producciones, de muchas chacras que posee en la provincia, abastecen con hojas de yerba a los paquetes de la empresa Cruz de Malta, que tiene versiones de yerba saborizada como “boldo y menta” y también “manzanilla”.
Junto a Feinmann en el programa estuvo el periodista Esteban Trebucq, conocido como “El Pelado”, quien dijo “40% de poleo, con eso rebajan el precio y perjudican la calidad”.
En tanto, Feinmann agregó: “Si vos le metes mucho poleo, la diferencia en guita que haces es monumental, estoy hablando de miles de millones de pesos, no es una pavada”. Acto seguido mostró el remito en la pantalla por la compra de 30 mil kilos a 450 mil pesos.
“Para qué compran semejante cantidad de poleo, la respuesta es obvia: para abaratar el precio” se preguntó y se respondió solo Feinmann.
Por su parte, el diputado provincial y expresidente del INYM (Instituto Nacional de la Yerba Mate), Juan José Szychowski, se sumó a la polémica y remarcó que “el poleo es perjudicial para la salud”.
En declaraciones a FM Show, indicó: “Cuando a un producto tan noble y genuino como la yerba mate, le ponen cosas extrañas que no están permitidos por el Código Alimentario, no solo ponemos en riesgo la salud sino también toda la actividad yerbatera. Por eso son tan importantes los análisis de calidad”.
Además agregó que “en la elaboración de yerbas tradicionales está prohibido que tenga cualquier sustancia que no sea yerba mate y si tiene poleo, es yerba adulterada no puede existir”.
En tanto, el Código Alimentario Argentino establece que los paquetes de yerba pura no pueden tener poleo y solo los paquetes de yerba “compuesta” puedan tener un máximo de 40% de otras hierbas y 60% de yerba mate.
Polémica por la desregulación
El diputado Szychowski, comerciante de hoja de yerba, apuntó contra su colega legislador Pedro Puerta por repetir la historia de su padre, quien cuando gobernó la provincia en la década del 90, “liberó el mercado y los pequeños productores debían vender su materia prima a un precio de miseria”.
Según manifestó Szychowski, las disputas con el también legislador, Pedro Puerta, se intensificaron, especialmente en las reuniones de comisión. “Tenemos dos visiones totalmente distintas de lo que es el negocio yerbatero”, afirmó.
Resaltó que mientras su gobierno, la Renovación, pretende un modelo que contempla a pequeños, medianos y grandes productores, Puerta persigue “maximizar ganancias” defendiendo la desregulación del mercado yerbatero, que ya tiene antecedentes de haber fracasado en los años 90.
Y por último reiteró la defensa de la regulación de la yerba y los controles de calidad: defendió la labor del INYM, el cual solía tener la potestad de inspeccionar la materia prima y controlar que todos los paquetes cumplan “las normativas del Código Alimentario”, de lo contrario eran incautadas.
Mateada en el Obelisco
El presidente a cargo del INYM (la Nación todavía no designó presidente), Nelson Dalcolmo, brindó ayer una conferencia de prensa donde contó que la Nación se comprometió a revisar y dar una respuesta al problema que atraviesa la yerba mate.
Sobre el viaje de yerbateros a Buenos Aires, el miércoles, dijo que “fuimos recibidos por funcionarios de Casa de Gobierno y también estuvieron funcionarios de Bioeconomía. Así que la idea era visibilizar esa problemática que estamos teniendo. La yerba y los productores necesitan una institución que los proteja”.
Los pedidos efectuados fueron tres: reestablecer las facultades del INYM eliminadas por el DNU 70/23, nombrar al presidente del organismo y, por último, frenar las importaciones.
Luego contó que “el jueves estaba prevista una reunión con el ministro Franco. A media mañana se comunicó con nosotros pidiéndonos disculpas que tenía que correrse hasta la feria agroactiva en Ámsterdam, donde estaba el señor Presidente. Pero quedamos comprometidos a una reunión, él nos va a avisar un día antes para que nos traslademos a Buenos Aires para charlar de estas cuestiones”.