Tras la devaluación que duplicó el valor del dólar oficial y con un aumento en el impuesto PAIS más la quita de subsidios, las tarifas del transporte público darían un salto que promete ser de shock para el bolsillo de los usuarios.
Desde el Grupo Z, quien participó en todas las reuniones en Buenos Aires fue el presidente de Empresarios Unidos del Transporte Automotor (EUTA) e integrante de la Federación Argentina de Transporte de Automotor de Pasajeros (Fatap), Guillermo Leumann. Sugirió en Radio República que el costo, para quienes deban pagar tarifa plana, “debería situarse en el equivalente a un dólar”. Según la cotización oficial del Banco Nación ayer serían 821 pesos.
“Yo lo que puedo dar es un parámetro o valor histórico en dólares, o inclusive, se lo puede hasta cotizar con el valor del precio boleto en Porto Alegre o en San Pablo, donde el trasporte público vale cuatro reales y medio”, dijo quien en la misma oración sugirió inclusive que su valor también podría ser de hasta US$ 1,5 (1231,50 pesos según BNA).
Leumann insistió que “la directriz es que va a haber una retirada de las compensaciones y la tarifa se va a disparar. Lo que estamos pidiendo desde la Fatap es que, si hay compensaciones, no sean destinadas a las empresas sino que llegue al sector de usuarios que no se encuentren en condiciones de poder pagar la tarifa plena, es decir que se compense la demanda (usuario) y no la oferta (empresas)”.
En la tierra colorada, previendo tal anuncio, el intendente reelecto de Posadas, Leonardo Stelatto, había manifestado a FM 89.3 Santa María de las Misiones que hay que esperar las definiciones de la Nación, en materia de compensaciones, para determinar la continuidad en la provincia de boletos gratuitos para sectores vulnerables como jubilados, estudiantes, pacientes oncológicos, para el año que viene.
En enero próximo, de acuerdo a lo que anunció el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, comenzará la quita de subsidios, procedimiento que se completaría entre marzo y abril.
También se espera conocer si la desregulación de la economía tendrá algún impacto en las concesiones de los servicios públicos que están en manos de los privados. Con esa información reunida, los municipios (y Concejos Deliberantes donde aún queda esa potestad en un deliberativo) deberán definir a partir de cuándo autorizarán una readecuación tarifaria.
“En la actividad no hay muchos recursos conocidos, el natural es la tarifa. Estamos en una situación de necesidad y urgencia de defender un servicio público de transporte, declarado servicio esencial por lo tanto se requieren soluciones rápidas, extraordinarias que no admiten más pérdida de tiempo”, sostuvo Leumann (en referencia a que el boletazo debería comenzar a aplicarse en enero mismo).
“Todavía no sabemos a cuánto se puede ir la tarifa del boleto, sí sabemos que no va a haber más compensaciones del Estado nacional, que a partir de enero ya comienza la quita y trascendió que en marzo o abril ya cesaría todo tipo de ayuda, con lo cual hay que ajustar tarifa porque no va a haber otro recurso, más allá de la compensación que la autoridad local quiera dar como para garantizar la accesibilidad al sistema de aquel que no pueda pagar la tarifa plena”, amplió.
Técnicamente, si se adoptara ese mecanismo para compensar, Leumann aseguró que podría hacerse a través de la SUBE. “Acá en Misione se podría hacer sin mayores dificultades”, amplió el empresario sobre su idea.
Durante el diálogo radial Leumann había señalado que estaba en duda el pago de aguinaldos al personal de las empresas por los atrasos que tiene el Estado en depositar los fondos.
Ayer por la tarde se supo que el Gobierno nacional liberó parte de esos pagos. Según se informó, el monto es de 8.900 millones de pesos y se distribuyó entre las compensaciones tarifarias del AMBA y el Fondo Compensador del Interior, donde la primera se lleva la mayor porción del dinero en detrimento de la segunda.
Calor infernal y espera interminable por servicio recortado
A la incertidumbre de lo que vaya a pasar con el valor del boleto único y la continuidad de la gratuidad del boleto para jubilados y estudiantes, ayer los usuarios del transporte público en el área metropolitana debieron soportar una espera interminable en las paradas de colectivos.
Sin previo aviso, las empresas del Grupo Z recortaron nuevamente las frecuencias.
Si bien cuando finalizan las clases existe un recorte de los refuerzos, que es esperable, los motivos también estarían dados, según trascendió, a un plan de las empresas Z para abaratar costos de operación tras la suba repentina de casi 40% en el valor de los combustibles.
En Posadas, Garupá y Candelaria se recortó al menos otro 20% de coches de refuerzo que hasta el jueves se encontraban disponibles para servicio, aparte del recorte que ya se había hecho hace algunas semanas, con lo cual la espera en un día de calor extremo fue interminable en las paradas de colectivos, lo que incrementó el mal humor social que ya viene en crecimiento a partir de las medidas de shock económicas que está tomando la Nación, y que no están acompañadas de un plan para que los trabajadores se defiendan del impacto al bolsillo que están provocando las subas.
