El presidente Alberto Fernández afirmó que «ya es hora de que Estados Unidos vuelque la mirada hacia América Latina», y aseguró que sus palabras en la IX Cumbre de las Américas constituyeron «un discurso contra la política exterior» que siguió el gobierno del exmandatario Donald Trump.
«Fue un discurso antipolítica exterior de (Donald) Trump. Ahora el presidente (Joe) Biden hoy tiene el deber de revisar eso y corregir las cosas. Biden fue el vicepresidente de Barack Obama, que abrió una puerta para terminar el bloqueo con Cuba. Se volvieron a reponer las embajadas. Mi queja fue al daño que la administración de Trump le ha hecho a América Latina”, señaló Fernández en una entrevista que ofreció a la cadena televisiva CNN en Español en la ciudad de Los Ángeles, donde se desarrolla este encuentro.
El presidente consideró que «la Cumbre de las Américas, no es una reunión social que autoriza cierto derecho de admisión al que la organiza», y de esta forma criticó la decisión tomada por Estados Unidos de excluir del cónclave a Cuba, Nicaragua y Venezuela.
«La verdad quise decir esto porque hay dos países en América Latina que están sufriendo. Uno es Cuba, que lleva décadas de un bloqueo que empezó en la Guerra Fría. Parece lejísimo todo esto. Cómo puede ser que estemos discutiendo esto. Y otro de forma reciente, que es el bloqueo sobre Venezuela, que ha condenado al exilio a muchos venezolanos y que ha dividido a la sociedad», apuntó el jefe de Estado.
Al respecto, aclaró: «No hablé de Nicaragua, hablé de Cuba y de Venezuela. Venezuela ha hecho en los últimos años un trabajo importante para recomponer el diálogo con la oposición, para llevar adelante elecciones limpias, que se han hecho. Ha habido elecciones en diferentes estados, el chavismo perdió el estado donde nació Chávez y nadie cuestionó o impugnó esa elección».
En tanto, Fernández calificó el discurso de Biden de extraordinario» porque «es maravilloso escuchar a un presidente de los Estados Unidos decir que no se puede seguir confiando en la teoría del derrame».
«Y escuchar algo más: que esa política que Biden aplica en los Estados Unidos quiere que trascienda los Estados Unidos y se aplique en el continente. Eso es maravilloso», evaluó.
El jefe de Estado argentino afirmó, además, que Estados Unidos es «un país muy importante que ha tenido que afrontar muchas dificultades».
«Enfrentó, como todos nosotros, la pandemia; afrontó el problema Afganistán; y ahora tiene que afrontar el problema de Rusia-Ucrania. Lo que digo es que ya es hora de que Estados Unidos vuelque la mirada a América Latina y termine fundamentalmente con estas dos restricciones que impuso (sobre Cuba y Venezuela), que me parecen profundamente injustas y en nada humanitarias», consideró.
Sobre la invitación a Biden a que asista a la Cumbre de Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), en diciembre en Buenos Aires, Fernández dijo que el mandatario estadounidense «se mostró muy contento con la invitación»
«Creo que de una vez por todas podemos dar el paso trascendente de respetarnos en la diversidad, porque no pensamos igual todos en América latina, pero sin embargo podemos juntarnos y unirnos para resolver problemas», sintetizó.
En ese sentido, el presidente indicó que la región «se dio cuenta de que la desunión entre los latinoamericanos permitió cosas terribles, por ejemplo los problemas que se generaron con la búsqueda de vacunas cuando la Covid arreciaba».
«Es hora de que nos unamos y es hora de que nos respetemos porque cada pueblo elige al presidente que quiere. Yo tengo con el presidente (ecuatoriano Guillermo) Lasso una relación espléndida a pesar de que todos saben de mi amistad con Rafael Correa», subrayó.
En relación a la renuncia de Matías Kulfas al ministerio de Desarrollo Productivo tras la difusión de un off que se originó en esa cartera y que cuestionaba aspectos de la política energética del gobierno, el mandatario indicó que el exfuncionario «se equivocó»
“Sí, se equivocó porque me parece que en un gobierno no tiene sentido que en off se planteen temas que puedan afectar a funcionarios. Creo que se equivocó Matías, que fue un gran ministro. Yo eso nunca estuve dispuesto a tolerarlo y no lo tolero, aun cuando pierdo a un gran ministro como lo ha sido», indicó.
En cuanto a su relación con la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, Fernández reconoció que «tiene básicamente algunas diferencias y nada más».
«Lo que pasa es que eso se convierte en un tema de permanente debate periodístico que, para mí, tiene más trascendencia en lo periodístico que en lo político. No tenemos la relación traumática que los medios ocupan y plantean”, aseguró.