El zaguero central Cristian Romero practicó a la par de los futbolistas que no actuaron el lunes en el empate ante Chile, realizando trabajos de campo con normalidad, lo que le permiten al entrenador del seleccionado argentino, Lionel Scaloni, tenerlo en cuenta para volver a la titularidad en el encuentro del próximo viernes ante Uruguay, por lasegunda fecha del Grupo A de la Copa América de Brasil 2021.
Los jugadores que tuvieron participación en el empate 1 a 1 frente a Chile en el estadio Olímpico Nilton Santos estuvieron en el gimnasio realizando trabajos de recuperación y regeneración muscular.
Mientras que el resto, pese al frío del atardecer en el predio abierto de Ezeiza, arrancaron la práctica poco después de las 18.30, con unos 8 grados de temperatura y a la luz de los focos de una de las canchas del fondo del predio afista.
Y dentro de ese grupo se destacó, para beneplácito del técnico, la presencia del cordobés Romero a la par de los lunes suplentes que efectuaron labores técnicas con balón para calentar los músculos y luego fútbol reducido en tres tiempos de 15 minutos cada uno.
El regreso desde Río de Janeiroluego del cotejo del lunes se retrasó demasiado y la delegación terminó embarcándose en el avión que los trajo de vuelta a Ezeiza pasada la medianoche, por lo que el arribo al predio donde concentrará hasta el jueves tuvo lugar minutos antes de las 5.
Esto provocó que los futbolistas descansaran casi hasta el mediodía y luego hicieran una siesta vespertina luego del almuerzo, razón por la cual los trabajos comenzaron cuando ya el sol había caído.
En cambio para el miércoles la historia será diferente, ya que el entrenamiento, que otra vez será por la tarde, se iniciará a las 17, con luz diurna.
El plantel practicará en Ezeiza hasta el jueves, cuando viajará hacia Brasilia, sede de los dos próximos encuentros, ambos desde las 21 en el estadio Mané Garrincha, ante Uruguay y el por ahora líder del Grupo A, Paraguay.
Frente a los uruguayos (con árbitro brasileño, Wilton Sampaio) el equipo argentino jugará el próximo viernes, mientras que ante los paraguayos que dirige el argentino Eduardo Berizzo lo hará el lunes venidero.
Por eso, como la sede de ambos cotejos será la misma, el plantel argentino permanecerá cinco días alojado en el hotel Windsor Brasilia, desde el jueves hasta el lunes, cuando como el lunes, retornará a Ezeiza inmediatamente después de finalizado el encuentro con Paraguay.
Y como en la cuarta fecha a Argentina le tocará la fecha libre y no jugará por una semana, permanecerá todo ese tiempo concentrado en Ezeiza, ya que recién el lunes 28 y siempre desde las 21, cerrará la fase de grupos enfrentando a Bolivia en el estadio Arena Pantanal, de Cuiabá.
El itinerario posterior dependerá obviamente de la posición en la que finalice en el grupo (clasifican cuatro de los cinco participantes), ya que los cruces serán los de los primeros con los cuartos y los segundos con los terceros en los cuartos de final.
Por eso la importancia de los dos próximos partidos para el conjunto albiceleste, ya que la necesidad de ganar la zona se vuelve imperiosa si lo que se pretende es, en principio y haciendo cuentas, evitar al local Brasil hasta la final del sábado 10 de julio, a las 21, en el estadio Maracaná, que será utilizado solamente para la definición del torneo.
Los cuartos de final se jugarán entre el viernes 2 y el sábado 3 de julio en tres sedes, las de los estadios Nilton Santos, de Río de Janeiro (desde las 21); Mané Garrincha, de Brasilia (a las 19), y el Olímpico de Goiania, el único que repetirá ya que contendrá juegos en ambos días, a las 18 y 22, respectivamente.
Las semifinales se disputarán el lunes 5 de julio en el Nilton Santos, desde las 20, y l martes 6 en el Mané Garrincha, a partir de las 22. En este mismo estadio se jugará el partido por el tercer puesto el viernes 9 de julio a las 21.
Pero a Argentina y a Scaloni lo que les preocupa es seguir aceitando el funcionamiento, volver a la victoria luego de esta sucesión de empates entre eliminatorias y Copa América, y sobre todo porque en el camino está nada menos que un buen equipo como Uruguay, el otro candidato a ganar el grupo, con una dupla temible en ataque como la que conforman los experimentados Luis Suárez y Edinson Cavani.
Ante eso, el técnico argentino empezará a trabajar de firme mañana con una defensa que le de mayor seguridad, y en ese punto el gran candidato a salir para que retorne «Cuti» Romero es Lucas Martínez Quarta, teniendo en cuenta la floja actuación que le cupo del lunes al defensor de la Fiorentina, en el mismo día en que había nacido su segundo hijo.
Y las alternativas que maneja Scaloni pasan por continuar con la línea de cuatro con Gonzalo Montiel, Nicolás Otamendi, Romero y Nicolás Tagliafico o, en su defecto, una de tres atento al potencial de la dupla Suárez-Cavani, en la que el que pagaría los platos rotos saliendo del equipo titular sería Tagliafico. Todo esto empezará (y terminará) a definirse este miércoles.