Desde que comenzó en los 80, la convocatoria logra más adeptos año tras año.
Mañana a las 4.30 de la madrugada, desde la rotonda de Posadas, larga la peregrinación en bicicleta a la Basílica de Itatí acompañando a la imagen de la Virgen.Se trata de una tradición de fe y voluntades que cumple 43 años y crece en convocatoria con cada edición.
Marcelo Prochaska, uno de los históricos ciclistas y colaboradores del evento, en diálogo con El Territorio relató que “estamos preparándonos para salir el 6, 7 y 8 con la peregrinación en bicicleta a Itatí acompañando a la imagen de nuestra madre María, estamos muy contentos de poder realizar una vez más esta travesía de fe”.
La primera peregrinación fue en el principio de los 80 impulsada por don Teófilo y doña Silvia Zurdel para cumplir una promesa y con el tiempo la posta fue pasando a sus amigos que mantuvieron viva la actividad y la comunidad se fue uniendo a la propuesta.
“Solamente hubo un año en el que no salió la peregrinación, en 2020 por la cuarentena por la pandemia de coronavirus que había que cuidarse”, relató Prochaska.
Acerca del itinerario de los ciclistas que unirán Posadas con Itatí, explicó que “no es una carrera ni una competencia, vamos todos peregrinando y acompañando la imagen de la Virgen, hay un operativo de seguridad coordinado en Posadas y en Corrientes y por eso vamos pedaleando agrupados y cuidándonos unos a otros, se vive un clima de mucha alegría y camaradería”.
Cada 20 kilómetros se para para descansar, reagruparse, recargar energías, hidratarse y seguir, “hacemos una parada para desayunar, un conocido corralón de Ituzaingó todos los años dona un refrigerio con frutas, un aporte muy bonito, luego paramos en Villa Olivari a almorzar y allí también hay personas que preparan un rico guiso y se descansa una hora más o menos y retomamos”, detalló y continuó: “Hacemos noche en Itá Ibaté, y bien tempranito a eso de las 4 salimos de nuevo. Hacemos otra parada a unos 20 km de Itatí y arribamos el 7 al mediodía. Allí nos espera un sacerdote que nos da la bendición”.
Prochaska expresó que la peregrinación es movida por la fe, la esperanza y a la vez es un motivo de encuentro entre la gente. “Vienen personas de todo el país y del Mercosur para participar de la peregrinación, con los años también se sumaron las familias, gente de todas las edades, hay un montón de personas que van con los vehículos de apoyo, las fuerzas de seguridad que nos cuidan, por eso digo que es un evento que une y que cada uno pedalea con su fe”.
El ciclista invitó a todos los que quieran participar, que asistan poco antes de la hora de largada para estar en la bendición y comenzar el pedaleo. “Algunos consejos a tener en cuenta antes de la partida podrían ser: tener la bicicleta en condiciones, tener ojo de gato, llevar agua, alimentos. Es una experiencia para vivirla y cada vez que uno llega a Itatí la emoción y los sentimientos son únicos e irrepetibles, por eso no es lo mismo contarlo que vivirlo”.
