Alrededor de las 22:40 horas, un hombre que caminaba por el barrio Felipe II, oyó los llantos de desesperación de un bebé de tres meses, que provenían de una plantación de yerba en ese vecindario, por lo que al adentrarse al lugar, encontró al lactante envuelto en una manta.
Inmediatamente, lo cargó en sus brazos y corrió hasta la dependencia policial, allí lo recibieron los efectivos de la guardia y la sargento de policía Antúnez Rumilda, quien fue la encargada de cobijarlo entre sus brazos para darle calor y alimentarlo hasta el traslado al hospital local.
Es por ello que los médicos le realizaran exámenes para corroborar su estado de salud mientras permanece en observaciones. Tomó intervención en el caso el Juzgado de Instrucción Nro. 3 de Puerto Iguazú.