El único detenido por el cruento asesinato de Ariel Camargo de Lara (19) cometido la semana pasada en la localidad de Bernardo de Irigoyen, cuyo cadáver fue encontrado con un balazo en la cabeza y semienterrado en un pastizal del paraje San Roque, se abstuvo de declarar y fue imputado por el delito de homicidio simple (Artículo 79 del Código Penal).
Se trata de Nicolás Eduardo de Lara (18), quien fue llevado ayer a la mañana hasta el Juzgado de Instrucción de San Pedro cuyo titular, Ariel Omar Belda Palomar, se dispuso a tomarle declaración indagatoria pero, asistido por su abogado defensor particular, el joven decidió no responder preguntas.
Fue así que el trámite se completó pasado el mediodía y el sindicado autor del crimen regresó a la dependencia policial a la espera del avance investigativo y que al expediente se vayan sumando elementos de prueba. Cabe recordar que en el momento que decida el acusado puede requerir ser indagado por el magistrado que interviene en la causa.
“Nada que esconder”
Paralelo a lo que sucedió en San Pedro, en la localidad fronteriza de Bernardo de Irigoyen la mamá del acusado, Sandra, esperaba novedades de lo sucedido en el ámbito tribunalicio.
En un breve diálogo con El Territorio manifestó creer en la inocencia de su hijo y ponderó que éste siempre se mantuvo a derecho y colaboró con la investigación, dando a entender que si le cabría algún tipo de responsabilidad en el crimen se hubiera escapado por uno de los tantos pasos fronterizos a Brasil que ofrece la frontera seca.
“Una persona que tiene algo que ver con algo así se va a escapar de la Policía, no se va a presentar y él (por su hijo) desde que lo buscaron para declarar la primera vez estuvo a disposición, contó todo lo que sabía, tranquilo, porque si debía algo era más fácil que se escape, más aun viviendo en la frontera”, dijo la mujer y sobre eso añadió que “si mi hijo debía hasta yo misma iba a hacer que escape pero no, estamos tranquilos porque no hay nada que esconder”.
“Con seguridad va a salir todo a la luz. Esto es todo de otra gente que le quiere poner culpas a mi hijo para zafar pero no se van escapar, el que debe va a pagar porque eso se está investigando”, puntualizó.
Sobre el supuesto vínculo del acusado con la víctima, la madre afirmó desconocer si existía pero acotó que su hijo “siempre fue respetuoso de los horarios que le decía para que regresara a la casa cuando salía, siempre me contaba hacia dónde iba y con quien se juntaba”.
Si bien admitió que no pudo hablar con su hijo en estos días al encontrarse detenido, la mujer contó que pudo verlo solamente algunos minutos en los últimos días, en la dependencia policial y que lo vio “tranquilo, él está bien”.
Mala junta
Otro de los familiares que habló con este matutino, pero que en este caso está relacionado con la víctima, es Sergio de Lara, tío del joven asesinado, quien si bien admitió que los investigadores policiales “están constantemente junto a la familia”, manifestó que “existe mucho hermetismo para no echar por tierra lo hecho porque están trabajando pero todavía no se sabe nada concreto sobre cómo llegó hasta el lugar o quién lo mató, además del porqué. La investigación está yendo despacito, pero a pasos certeros”.
Sobre su sobrino manifestó que “era un chico alegre, se llevaba bien con todo el mundo, tenía amigos, una novia con quien convivía; lo único complicado es que por ahí se metió con mala junta o le cazaron y se lo llevaron por envidia o por algo que pasó, suponemos eso porque la verdad es que no sabemos hasta ahora por qué lo mataron, si fue una venganza o algo así, porque el chico no tuvo ni chances de defenderse siquiera”.
La semana pasada familiares y allegados hicieron una marcha para pedir “justicia para Ariel” y el “rápido esclarecimiento del crimen”, movilización en la que participó más de un centenar de personas. Sergio agradeció “a toda la gente que colaboró, que estuvo, los vecinos que salieron a las calles, que dieron la cara o amigos que en ningún momento dudaron en pedir justicia por la amistad que tenemos en el pueblo. Es la misma gente que colaboró con la familia buscando a Ariel durante cuatro días con más o menos diez vehículos, en montes y en las chacras cuando se creía que estaba desaparecido, pero con vida. Toca esperar ahora el avance de la investigación con la confianza de que la verdad saldrá a la luz y quien lo mató, pague”.
Brasileño detenido en Chapecó
Se supo que en las últimas horas fue detenido un segundo sospechoso que podría estar vinculado al crimen. Se trata de un ciudadano brasileño con múltiples cruces en la frontera, aprehendido en Chapecó. Fuentes policiales informaron a este matutino que no existen aún elementos fuertes que avalen que haya estado en el lugar del crimen, pero una serie de testimonios lo comprometerían y es por eso que sería indagado.
Más allá de eso, en lo que respecta a la causa, se supo que de ahora en más también comenzarán a declarar los testigos, entre los que están las dos chicas consideradas clave para la pesquisa en razón de que serían quienes delataron al principal acusado después de que éste le habría confesado haber estado presente cuando un segundo hombre ejecutó a Camargo de Lara de un disparo en la cabeza, efectuado de atrás. Las hermanas de 16 y 26 años fueron decisivas en el hallazgo del cuerpo, al contar con detalles lo que supuestamente le había dicho el sospechoso y con sus testimonios dieron un vuelco rotundo a la investigación que hasta ese momento giraba en torno a la desaparición de persona, ya que la víctima había salido de su casa por voluntad propia.